lunes, octubre 30, 2006

En torno a FON

Hace aproximadamente un año que se lanzó FON. Se trata de crear una red, repartida por todo el mundo, a la que se pueda conectar mediante wifi cualquier persona que lo desee, usando las conexiones ADSL o de cable de los usuarios de la red, bien gratis (usuarios "Linus") o bien pagando (usuarios "Bill" o "Alien"). Los Linus comparten su conexión a cambio de poder usar la red gratis en cualquier parte; los Bill comparten su conexión con los Linus y reciben un 50% de los ingresos que genera su punto de acceso de los otros Bill que se conectan a ellos o de los Alien, pero no tienen conexión gratis; y los Alien son usuarios que no comparten su conexión o que ni siquiera la poseen, de manera que deben pagar por conectarse a la red wifi de FON.

FON es una creación del prolífico empresario Martin Varsavsky. Este curioso personaje ya lo conocíamos de Jazztel y Ya.com, empresas que creó y vendió en poco tiempo. La verdad es que FON es una idea brillante y original, pero que en mi opinión se puso en marcha con demasiada premura y sin haber madurado demasiado la estrategia completa. Empezaron distribuyendo routers Linksys WRT54G a bajo precio para atraer clientes, y claro, muchos se registraron en FON y se lanzaron a por ellos como locos debido a que, además del bajo precio al que se vendían, estos routers llevan una versión de Linux en el firmware y son fácilmente flasheables a OpenWRT o a DD-WRT, por ejemplo, que son unos firmwares muy avanzados y que dotan de prestaciones excepcionales a los Linksys (entre otros). El resultado de ello es que el número de "foneros" reales (es decir, de aquellos que tienen el router activo y con el software de FON puesto) es mínimo comparado con el número de foneros registrados. Incluso en eBay es posible encontrar Linksys de gente que adquirió uno o varios de estos routers para revenderlos luego a un precio cercano al que tienen en las tiendas y ganarse así un buen dinero.

En vista de esto, FON decidió fabricar y distribuir su propio router (la Fonera, que es como siempre lo han llamado), con un firmware basado en OpenWRT, pero con un sistema de encriptación para evitar el reflasheo. También se ha vendido a bajo precio, incluso se han regalado muchos de ellos, pero como el anterior, este firmware tiene algunas carencias importantes y a muchos usuarios les resulta muy difícil de configurar y de hacerlo trabajar en su red de casa. Para Navidad se anuncia un nuevo router: el FON Liberator, similar al actual pero con un puerto USB al que se puede conectar, por ejemplo, un disco duro externo y así intercambiar ficheros con el Bittorrent sin tener el ordenador encendido.

Otro problema de la red FON es el escaso alcance de los routers, ya que poseen una antena estándar que apenas cubre unas docenas de metros. Y si encima el usuario vive en un séptimo piso, por ejemplo, cosa muy común en las ciudades y pueblos grandes (que es donde FON tiene más usuarios registrados), la cobertura hasta la calle es ya casi inexistente. Por eso, muchos usuarios "linus" de FON se quejan de que en sus desplazamientos no encuentran un punto FON al que conectarse, y en el caso de encontrarlo, les resulta inaccesible.

El resultado de todo esto es que el número de foneros registrados, y que aparecen en los mapas de FON, no se corresponde en absoluto con el número de puntos activos y accesibles. Si se observan dichos mapas, se observará fácilmente cómo la mayor parte de los puntos aparecen en naranja, que corresponden a foneros registrados pero que no disponen de router o no lo han registrado en la red FON. Y este tipo de usuarios son aproximadamente un 85% del total, lo que muestra bien a las claras que los más de 100.000 puntos FON que hay en todo el planeta son sólo una cifra sin valor, ya que una cosa es registrase en una web y otra muy distinta es estar dispuesto a tener el router todo el día encendido y compartir la conexión con cualquiera que viva o pase cerca de tu casa.